Por: Dr. César Vázquez Muñiz (Portavoz de Puerto Rico por la Familia)
Aquí les dejamos un artículo escrito por el Dr. César A. Vázquez, portavoz de Puerto Rico por la Familia. Para más información pueden visitar http://prporlafamilia.com/
Para cambiar los valores de un pueblo sólo tienes que influir en la niñez. Unas minorías pretenden cambiar la visión que como pueblo tenemos sobre la sexualidad humana. Los puertorriqueños creemos que la expresión correcta de la sexualidad humana es la relación entre un hombre y una mujer. Esta idea nos la enseña la historia y nos la enseña la Biblia, pero sobre todo nos la enseña el cuerpo. Esta es una verdad evidente en sí misma que nace de la realidad biológica de que los cuerpos del hombre y de la mujer se complementan y que de esa complementariedad nace la vida. De hecho, por causa de esa realidad es que todos existimos.
Pero la mayoría no tan solo cree esto sino que también cree que la expresión de la sexualidad humana tiene unos límites que surgen de la moral, de la decencia y de la religión. También creen que estos límites deben ser expresados en las leyes que gobiernan un pueblo. Sin embargo hay unas minorías que entienden que el único límite que la sexualidad debe tener es el placer que produzca. El problema para ellos es que no han podido convencer ni al pueblo ni a la legislatura que los representa. Sin embargo, tienen acceso directo al señor Gobernador y por lo tanto al Secretario de Educación. Ambos funcionarios han abrazado estas ideas y para imponerlas van contra nuestros niños.
La primera estrategia es menoscabar la autoridad de los padres sobre sus hijos para que estos niños estén a merced de otros adultos. La idea que proponen es que los niños pertenecen al Estado. Para eso enfatizan la realidad de que algunos padres ponen en peligro a sus hijos. No dicen sin embargo que los niños que están bajo la tutela del Estado están en mayor riesgo de maltrato. Tampoco dicen que, tanto para la constitución federal como para la de Puerto Rico, la autoridad de los padres sobre los hijos es un derecho fundamental. Este derecho fundamental se lesionaba en los cambios al Código Civil propuestos en el 2007 y vaticino que serán incluidos en la próxima revisión al Código Civil, particularmente el libro de familia.
La otra estrategia es adoctrinar los niños a través del sistema de educación pública . Para eso han seleccionado a la enseñanza de perspectiva de género como instrumento ideológico. Se proponen implantarla, aunque no tenga base científica…aunque no tenga base legal. Los cambios al uniforme y la posibilidad de baños compartidos son la consecuencia lógica de esta ideología. Si cada cual tiene el derecho absoluto a construir su sexualidad sin límites externos, entonces cada cual tiene el derecho a vestir como quiera y a usar el baño de su preferencia. No les importa el bullying que se vaya a generar por el rechazo a estas conductas por parte de otros niños. No les importa la confusión que van a causar en los niños que vean estas conductas. No les importa el conflicto que surja entre los niños y sus padres por estas ideas. Mucho menos les preocupan los peligros que los niños enfrentan al poner en práctica unas ideas equivocadas sobre la sexualidad. Tampoco les importa los problemas que se van a generar en el salón de clases y que van a tener que ser manejados por los maestros. Y por último, no les importan los conflictos de conciencia que puedan generarse en los niños, en sus padres y en los maestros. Y no les importa porque como Herodes sienten que para mantenerse en el poder tienen que sacrificar a los inocentes.
Pero los niños tienen padres y los maestros tienen conciencia. No nos vamos a cruzar de brazos frente a este uso ilegítimo del poder. Vamos a usar el derecho que nos da la democracia de protestar, como parte de las estrategias para enfrentar este atentado contra la niñez. Vamos a demostrar nuestra indignación con la acción concreta de manifestarnos masivamente contra estas políticas del Departamento de Educación. Estamos convocando a los padres, a los maestros y a todo el que se sienta indignado a que nos acompañen el martes 27 de octubre de 2015 a las 10 de la mañana frente a las oficinas centrales del Departamento de Educación en la calle Calaf en Hato Rey. Allí haremos declaraciones que son pertinentes y relevantes para enfrentar este peligro. Callar ante la injusticia es complicidad.
