Por: Dr. César Vázquez Muñiz (Portavoz de Puerto Rico por la Familia)
Aquí les dejamos un artículo escrito por el Dr. César A. Vázquez, portavoz de Puerto Rico por la Familia. Para más información pueden visitar http://prporlafamilia.com/
La página 543, sección (1) del Código de Rentas Internas para un Nuevo Puerto Rico (enmendado en enero del 2014), declara a las iglesias y a otras organizaciones religiosas exentas de contribuciones, siempre y cuando las ganancias netas no beneficien a ningún individuo en particular. El inciso (c), página 552, establece que toda organización declarada exenta…”será considerada una organización exenta de contribución sobre ingresos para fines de cualquier ley que haga referencia a organizaciones exentas de contribución sobre ingresos.” El inciso (d) (3), páginas 552 y 553, que le da autoridad al Secretario de Hacienda para revocar una exención contributiva, excluye a las iglesias, a todas las iglesias. Sean cristianas, islámicas, budistas, de santería, espiritistas, o del Monstruo del Espagueti Volador. Esto es así porque son iglesia o una institución de creencia similar a la iglesia cristiana. Aunque la del Espagueti, al final de cuentas, sea una farsa y una burla a las creencias religiosas.
No es el Estado quien define qué constituye una iglesia legítima. Basta con que el grupo se defina así mismo como tal. Ya esto está resuelto por nuestro más alto tribunal. Y esto es así porque el Estado no puede tener el poder de decidir cuando una fe es legítima o no. Ésa decisión la toma cada individuo en el ejercicio de su libertad de conciencia. De hecho la primera y más fuerte manifestación de lo que llamamos libertad de conciencia es la libertad de religión. Cuando una persona ejerce su libertad de religión está estableciendo que tiene una lealtad más profunda hacia su idea de lo que pueda ser Dios, que al Estado. Una expresión concreta de este principio lo fueron los cristianos que por negarse a declarar que el César era el Señor fueron martirizados. Cuando el Estado se erige como una institución con poder absoluto, que exige lealtad absoluta, se persigue a la iglesia. Así pasó en Alemania con Hitler, en la Unión Soviética con Stalin, en la China con Mao, y ahora está pasando en Corea del Norte y en los territorios dominados por el Estado Islámico. Ahora en Puerto Rico estamos enfrentando nuestra particular cosecha de aprendices de dictadores. Y todo por dinero… o por venganza.
¿Se puede abusar de la libertad que la Iglesia tiene? Todas las libertades se pueden abusar. ¿Habrá alguien que se esté aprovechando de la exención contributiva de la iglesia? Puede ser. Jesús dijo que el reino de los cielos sería como el que siembra trigo y luego viene otro y siembra cizaña, yerba mala. Los dos van a crecer juntos… pero será Jesús el que haga la separación al final de los días. El primer ejemplo de esto lo fue Judas, que era apóstol y también robaba. Sin embargo, esto para nada le quita legitimidad al mensaje del Evangelio y a la obra de la Cruz. Dicho esto, todo aquel que esté violando la ley y haya evidencia debe enfrentar las consecuencias. Si el Secretario de Hacienda tiene evidencia de malos manejos, que proceda administrativamente y luego judicialmente. Hablar y no actuar es arrojar fango indiscriminadamente para salpicar a todos.